Hacer jabón en casa fue una de las cosas que descubrí cuando era peque. Mis padres guardaban el aceite viejo de freir para luego reutilizarlo para hacer jabones con diferentes olores.
Se pueden hacer con el aroma que deseemos, así como de cualquier tamaño; mis padres siempre utilizaban como molde los envases vacíos de la margarina.
El proceso y las cantidades para hacerlo vienen muy bien explicadas en la revista digital Autosuficiencia Económica, que también cuenta la historia del jabón.
También existen numerosos vídeos explicativos del proceso de elaboración, aunque uno de los mejores que he encontrado es el Método sencillo y rápido.
En próximas entradas colgaré información para elaborar sales y velas.
